Al momento de
escuchar la palabra “nación”, miles de conceptos y definiciones se hacen
presentes en nuestra cabeza, pero… ¿Qué significa realmente este término?, en
la obra “Comunidades Imaginadas” de Anderson Benedict dicha palabra tan
compleja, es analizada y estudiada desde una perspectiva histórica, con el
objetivo de descubrir la naturaleza de esta y en sí, su origen.
En primer lugar, el
concepto de “nación” hace alusión a una comunidad imaginada por varias personas,
las cuales, tienen consciencia de que más gente forma parte de ella, en un
inicio, se considera que las naciones han prevalecido a lo largo del tiempo,
algo a lo que Anderson se opone, pues, el establece que este término es el
resultado de una progresiva modernidad.
Al estudiar la
historia a mayor profundidad, se establece que distintos hechos históricos
fueron los causantes de una concientización de lo que en sí era una nación,
todo parte en la mitad del siglo XV con la difusión de la imprenta, con dicha
herramienta, se logra llegar a una determinada porción de la población europea,
la cual, estaba alfabetizada, posterior a esto, el capitalismo incesante de ese
entonces, tuvo la necesidad de expandirse aún más sobre el resto de la población,
es por ello que, el uso de las lenguas vernáculas en escritos resultó en la
creación de una comunidad con gente que se entendía entre sí. El cambio en el
carácter del latín como lengua principal, la fuerza de la Reforma y la
expansión que adquirieron las lenguas vernáculas fueron factores determinantes
en el resultado ya mencionado.
Debido a la cantidad de personas alfabetizadas por los textos impresos, fue más sencillo el establecer las bases de lo que era la nación en un ámbito colectivo, la comunidad a partir de este cambio empezó a concientizar acerca de lo que en realidad significaba formar parte de una nación y en sí, lo que este término abarcaría consigo, el nacionalismo viene a la par con lo que nación significa, el sentimiento de pertenencia de un determinado lugar y el deseo de defenderlo siempre, se hacen presentes con este término, el respetar y amar a nuestra nación es algo que todos deberíamos hacer, no obstante, también se debe precaver que nuestro buen juicio no se nuble pisoteando otros elementos que de igual forma son importantes.
El Nacionalismo en Ecuador
Si bien es cierto,
en el libro “Rehaciendo la nación” de Sarah Radcliffe y Sallie Westwood, el nacionalismo
está conformado por tres aspectos importantes, la población, el territorio y la
historia, sin embargo, la población es un elemento indispensable para que el sentimiento
nacionalista cobre sentido. La enseñanza juega un rol fundamental en la vida de
los ciudadanos con respecto a este tema, pues, las diversas instituciones
educativas son las encargadas de implementar la historia del país, y, a su vez,
las grandes riquezas que posee un determinado territorio dentro del aprendizaje
del estudiante.
Fechas
conmemorativas y los varios símbolos patrios siempre se hacen presentes en el
ya mencionado proceso, no solamente se inculca el pasado de una nación, sino
también se vela por el futuro del mismo, esto se logra incorporando valores como
el respeto por una determinada nación, así como también la idea de que no hay
nada mas honorable que defender la patria, esta última puede ser tergiversada ya
que a lo largo de la historia, un sentimiento nacionalista exagerado ha descarrilado
miles de enfrentamientos innecesarios.
El nacionalismo en
Ecuador es una expresión, sentimiento y conocimiento de nuestras raíces. Nuestra
historia está basada en material escrito por grandes historiadores que han buscado
dar a conocer la importancia que tiene el respeto a todo lo que en conjunto es nuestro
Ecuador. Encontramos a nivel educativo varios textos en los cuales, a través de
múltiples y ricas historias, anécdotas o cuentos, son capaces de desarrollar imágenes
vivenciales en los estudiantes en donde se aprende acerca de tradiciones,
fechas cívicas y etnias con el objetivo de desarrollar amor a quienes somos.
Se puede concluir
diciendo que el concepto de “nación” así como también el de “nacionalismo”
tienen por detrás miles de elementos que muchas veces pueden ser de una difícil
comprensión, quizá algunas veces se tiene un concepto erróneo con lo que
respecta a estos temas, sin embargo, el conocer y dar una adecuada interpretación
a lo que estos se refieren, nos aportan en cuanto al conocimiento histórico de
un lugar. El conocer el pasado, nos permite entender el presente. El
sentimiento de cuidado y amor que muchas personas tienen por una nación es
admirable, no obstante, es importante establecer ciertos límites en cuanto al
sentimiento nacionalista, de modo que así, una nación no se vea perjudicada.
Referencias
Anderson, B. (1993). Comunidades
imaginadas.
Radcliffe,
S. A., & Westwood, S. (1999). Rehaciendo
la nación: lugar, identidad y política en América Latina.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario